lunes, 3 de diciembre de 2012

Los Dalton contra Lucky Luke

¿Cómo empezar a hablar de este engendro sin usar palabras malsonantes ni herir la sensibilidad de sus hacedores? Supongo que para su realización ayudó el hecho de que el dibujante Morris y el guionista René Goscinny (los padres de la criatura sobre el papel) estuvieran muertos, por aquello de que no protestarían en plan Alan Moore, pero si un día vuelven como muertos viviendo reclamando venganza, que sepáis que seguramente se deba a esta patochada.

Que cabrones... se atreven a poner "En homenaje a René Goscinny"...
¿Que les habrá hecho el fallecido guionista de los cómics?

La película se centra en los dos cuatro hermanos Dalton, ladrones de poca monta que, en un alarde de amor maternal intentan robar un banco para que su mami se sienta orgullosa. Amor de hijo. Pero las cosas van mal, ya que el banco está armado y protegido hasta los dientes y hasta la última viejecita del local tiene un rifle con el que desarmar a los Dalton. Lucky Luke, que pasaba por allí, se limita a soltar una frase poco ingeniosa y mandarles a la cárcel. Allí, descubren una historia de un pueblo de México sometido a un tirano gracias a un sombrero mágico diabólico de la muerte que lleva. Sí, apenas llevamos veinte minutos de película y los guionistas ya estaban fumados. Cuando logran escapar de la cárcel, huyen al susodicho pueblo para enfrentarse al tirano (agarraos, que es nuestro hispánico actor cómico Javivi) y robarle el sombrero. El sombrero, hecho de plastilina del infierno, con calaveras y ojos colgando, protege a su portador de todos los disparos, por lo que los dos cuatro Dalton luchan una batalla de dimensiones épicas para conseguir el sombrero, volver a los Estados Unidos y volver a robar el mismo banco.Errr... bueno, todo lo épico que pueda ser una batalla cuyas bombas consisten en gallinas con guindillas en la boca...

Los dos cuatro hermanos Dalton.
El pequeño se tiene que agachar para parecer más pequeño y no romper la escala.


Ya la secuencia de inicio, con un asalto a una diligencia con más gadgets que el coche de James Bond, pero mucho más inútiles, a la luz del amanecer, nos augura que algo no va bien. De entrada, la iluminación y la fotografía. Algo va jodidamente mal. La presentación de los Dalton tampoco mejora mucho, con Joe, el más pequeño y líder de los criminales, cuya mayor gracia es hacer muchos “um, um, um” poniendo morritos y moviendo el mostacho. Muchas veces. El ridículo del primer intento de atraco se ve eclipsado por los diálogos de los Dalton. ¿Por qué? Preguntareis sabiamente. Pues porque uno pensaría que una película sobre Lucky Luke tendría dos opciones: a) ser una película infantil o b) ser una película seria adaptada para adultos (que en algún momento fueron niños y recuerdan Lucky Luke como un héroe de su infancia). Por la estética y el desarrollo de la película uno optaría por la opción a), pero tras escuchar la retahíla de “Mierda”, “Joder”, “Ostia!”, “No me jodas…”, “Me cago en…” y vocablos similares que componen el 50% de los diálogos de los Dalton, uno llega a la conclusión de que no es una película que debería dejar ver a su hijo. El caso es que solo recuerdo a dos de los Dalton hablando, los otros dos parecen estar para completar el cupo de cuatro hermanos. Ya no sé si eran dos o cuatro. O el guionista estaba de huelga, vaya usted a saber... El vocabulario de Lucky Luke (quien, por cierto, aparece menos que un diputado por su escaño), se limita a soltar “Buah!” sin mucho entusiasmo, así que la cosa no mejora mucho.

El óxido del cañón le aporta el toque SteamPunk, que está de moda.
La estética… ¡ay! La estética de la película… mezclando ese gusto del cine francés por lo exagerado y la idea de que siendo una película de un cómic debería ser vistosa y colorida, toda la película está tratada con mucho colorido saturado que hace daño a la vista. Menos cuando el iluminador estaba de resaca, como en la secuencia de inicio, que entonces no se ve un carajo. El resultado, un derretimiento de las pupilas y un sentido del ridículo perdido. Hasta la melena rubia del caballo (sí, le han teñido la crin de rubio a un caballo, que por cierto, habla) hace daño a la vista. Por no hablar de la frontera con México.

Poner cara de malo no es igual que poner cara de oler mierda.
Sobre las actuaciones, os podréis imaginar, todas basadas en la exageración y el ridículo. En el mejor de los casos. La adaptación al español no se libra de culpa, con un doblaje particularmente torpe, voces ridículas y de idiota perdido para traducir chistes estúpidos, y muchos chascarrillos que en algún momento, en algún programa de la telebasura más profunda, estuvieron de moda durante una semana o dos, a lo sumo. Oír a un Dalton repetir hasta la saciedad “¿Qué pasa, nen?” es más de lo uno podría desear a su peor enemigo.

Una de las escasas apariciones de Lucky Luke haciendo de guaperas.
En fin, que la sombra de Lucky Luke es de lo mejor de la película (lastima que no he encontrado ninguna foto), tanto en efectos (aunque hayan pensado que era divertido poner la silueta del dibujo original y no la del actor…) como en interpretación. Solo os diré que la versión que hiciera Terence Hill unos años atrás le da mil vueltas a esta (y mira que era sosa). Si alguien consigue reírse con esta película, o no se siente ofendido en sus recuerdos del conocido pistolero, que me lo haga saber, por favor. Os aseguro que será la hora y media (apenas llega) más larga que habreis vivido.

Javivi, un actor de método...
PD: Una pregunta inocente que me asalta en este momento... ¿Por qué los cineastas franceses odian tanta a sus cómics?

PPD: Aquí os dejo el link a IMDB, para que saboreeis que no llega ni a tres puntos, y el link a Filmaffinity para disfrutar de los comentarios de su sufrido público.





3 comentarios:

  1. Sí, la recuerdo...Dios mio,ese caballo teñido hablando...a Javivi haciendo muecas extrañas todo el tiempo...la banda sonora desastrosa...qué siesta perdida, no me lo perdono.
    Me alegra veros de nuevo colgando artículos, se os echaba de menos. Ponéis un punto de cordura en esto de los filmes. Tenéis que colgar cosas más a menudo.

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  2. Gracias, críticas locas... pero aunque hemos llegado al peligroso punto de ver películas que sabemos infumables solo para ponerlas aquí, debemos cuidar nuestra propia cordura... o empezaremos a decir que bazofias como esta son buenas...

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  3. Tú lo has dicho...para cuándo alguna crítica de series de televisión infumables...ahí tenemos mucho que poder aportar también...yo la lanzo la idea...

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