Jason X

El cine “Slasher”, un subgénero dentro del cine de terror caracterizado por cuchillos, adolescentes gritando y mucha sangre, está tan trillado y lleno de topicazos que nos ha dado, junto a alguna joya convertida en clásico del cine de terror, mucha morralla. “Viernes 13”, junto con las pesadillas de Freddy Krugger, es una de las sagas de este género más longevas y exitosas. Si bien tuvo un comienzo digno, llegó el momento inevitable en que cada película era peor que la anterior (por difícil que parezca). “Jason X” es la décima entrega  (y última, por ahora, si no contamos los cross-over del tipo “Freddy vs. Jason”), que no solo confirma esta teoría sino que la remata. Difícilmente podrán hacer algo peor que esto.

-    Oye, tengo una idea sobre una nueva película…
-    A ver, dime.
-    Verás, la humanidad ha abandonado el planeta Tierra, contaminado y prácticamente destruido, y vive en la órbita del planeta. Ocasionalmente, regresan a la superficie a recoger muestras y objetos del pasado de la sociedad humana… ¿Qué te parece la premisa? ¿A que da juego?
-    Ehhhh… sí, bueno, parece interesante. El caso es que necesitamos algo que tenga tirón…
-    Vaya, sí, claro, entiendo… quizá podamos reestructurar la historia para adaptarla a alguna saga de la que tengamos licencia o algo, así enlazamos las historias…
-    Sí, podría ser, mira: precisamente tengo aquí encima los derechos de “Viernes 13”, ¿Crees que se podría enlazar?
-    ¿Viernes 13? Esto… bueno, si, ¿Cómo terminaba la anterior? ¿Con Jason muerto o capturado? Supongo que si lo iniciamos en el presente, congelamos a Jason y que lo recojan en el futuro, donde podemos revivirle… “Jason en el espacio”, eso debería tener tirón. Sin olvidar la profunda trama psicológica subyacente, ya sabes, lo de recoger los restos de la civilización…
-    Eso tal vez funcione, pero estamos muy justos de presupuesto, y suena a caro. Necesitamos atraer a muchos adolescentes descerebrados al cine y esas cosas, sin gastarnos mucho.
-    Ya, bueno, ahora con ordenadores puedes hacer cuatro escenas simples del espacio, y el resto lo desarrollamos en el interior de la base, así que no necesitamos mucho. Y si acaso, podemos buscar actores baratitos, para ahorrar. Si hay que atraer público adolescentes, a las actrices mediocres no les importa salir con poca ropa...
-    Sí, eso tiene mejor pinta… si necesitamos recortar algo más del presupuesto, el guión lo puede hacer mi sobrino, que me lo hace como un favor en un par de tardes…



Y así es como mi mente enferma se imagina que se gestó el origen de esta película. Este hipotético dialogo entre los productores quizá no esté tan lejos de la realidad. Al principio de la película, la premisa de los recolectores de objetos de la tierra me pareció interesante, ahondar en qué tipo de sociedad tendremos en el futuro y lo que podrán encontrar y deducir en sus investigaciones sobre nuestra época. Pero la ilusión dura poco, ya que enseguida los investigadores abren la boca para cagarla. Todos son una panda de descerebrados adolescentes que únicamente piensan en liarse entre ellos, ignorando cualquier posibilidad de explotar una historia. Hasta tal punto llega el desajuste hormonal de esta gente que en la escena del despertar de Jason, la única excusa que encuentran para dejar sola a la primera víctima y despertar a Jason es que el resto de la tripulación está en sus respectivos dormitorios tirándose a su correspondiente pareja. Ojo, que son universitarios, y se supone que están aprendiendo, pero en lugar de eso, deciden enrollarse delante de la profesora, hasta que esta les invita a irse y dejarla sola. Este primer asesinato es de lo más patético que hemos visto en la saga, alternando escenas de sexo ridículo (lo del sadomaso es MUY ridículo) con una muerte “original” (hundiendo la cara a la víctima en nitrógeno líquido para después estampársela contra la encimera). Y solo es la primera, lo que ya nos indica cómo se desarrollarán los acontecimientos. Eso sí, es la más original, el resto de muertes se reducirán a cuchilladas, espaldas rotas, cabezas cortadas y demás topicazos del genero. Jason se limita a matar sin ton ni son, ni mayor motivación que ser el malo. Mientras, algunos de los lumbreras de los responsables del centro empiezan a barajar la posibilidad de negociar con los restos de Jason y hacerse millonarios (recordemos que Jason no muere, a pesar de las múltiples ejecuciones que se han probado con él).

Nada pone más cachondo que hacerle la autopsia a un tipo con máscara...

Como veis, tanto el planteamiento como los personajes no tienen desperdicio. Niñas guapas moviéndose casi en pelotas, algún militar malhumorado y corto de miras, una original robopilingui (como diría Bender) cuya originalidad radica en que no tiene pezones  y un capitán avaricioso que quiere vender a Jason y hacerse rico.

¿Terminator? ¿Vega en Street Fighter? ¿Robocop? No, es Jason...

Rizando el rizo, y dado que estamos en una película futuristas, los productores anteriormente mencionados, pensaron que eso de la máscara de Jockey desentonaba, así que fueron a darle un aire más tecnológico: en mitad de la película, cuando pensabas que Jason había sido destruido, este se convierte en un ciborg con máscara cromada tope futurista. Con diálogos y desarrollos que rozan el surrealismo (ay! Si Luis Buñuel levantara la cabeza…), actuaciones que rozan el ridículo, una misteriosa aparición de David Cronenberg en mitad de la película, y una estética bastante chusquera más propia de una serie de bajo presupuesto que de una secuela de una saga de éxito, la película se hace difícil de ver hasta para los amantes del género.

La escena en la que, mediante realidad virtual, recrean el Crystal Lake y Jason se carga a dos adolescentes en pelotas no tiene desperdicio. A falta de originalidad, esta escena ya se hizo (calcada) en la septima entrega. ¿O era en la Sexta? Que má da...

Como no podía ser de otra manera, Jason no acaba de morir y la escena final nos deja entrever que dejan la puerta abierta a una secuela más. O no, después de lo decepcionante que fue esta, hecho reconocido hasta por los más aferrimos amantes de la saga y de los “slashers” en general. Aunque si queréis verla como una parodia de si misma y  echaros unas risas, vosotros mismos.